Notificaciones inválidas y sus consecuencias
“No es mejor el que nunca falla sino el que nunca se da por vencido”. Esto debe pensar Hacienda cada vez que realiza una notificación defectuosa. Una notificación tributaria defectuosa es tan importante que puede dejar sin eficacia un acto de la Administración o hacer que el tiempo corra en contra los plazos con los que cuenta Hacienda para regularizar y sancionar a los contribuyentes.
Las causas pueden ser múltiples, pero, entre las más frecuentes están la notificación realizada en un domicilio que no es del contribuyente, notificaciones a personas no autorizadas e, incluso contenido erróneo de la notificación.
Por tanto, cuando recibas una notificación, anota bien la fecha de recepción y la persona y lugar que la ha recibido. Recuerda también, que a partir de la fecha de recepción de la notificación se inicia automáticamente el computo de los plazos para contestar al acto en cuestión, presentar un recurso e iniciar tu defensa fiscal. ¡No tienes tiempo que perder!
